Scalapay impulsa el pago a plazos en vacaciones, respondiendo a la demanda de una nueva generación de viajeros que busca experiencias sin comprometer su economía
España vuelve a batir récords y este 2025 se espera que el gasto total en vacaciones sea de 55.000 millones de euros, lo que supone un 2,6% más que el año pasado, según las previsiones de Andersen Consulting. El turismo español, además de seguir creciendo, está cambiando sus hábitos de pago. Lejos de recurrir exclusivamente al ahorro previo o al endeudamiento bancario tradicional, las soluciones de pago a plazo ganan terreno puesto que permiten disfrutar de los destinos deseados sin causar estragos en la cuenta bancaria y sin pagar intereses.
Según datos de Scalapay, la empresa líder en “Compra Ahora, Paga Después” (BNPL) en el sur de Europa, el uso del pago a plazos en el sector turístico ha experimentado un crecimiento interanual del 65%, confirmando que los consumidores están dispuestos a invertir en viajes, siempre que el proceso de pago se adapte a sus necesidades. El coste medio total de las vacaciones de verano para los españoles se sitúa actualmente en torno a los 1.300 euros, una cifra que, sin opciones de financiación, puede limitar la planificación de escapadas más costosas.
El perfil de los viajeros que optan por pagar a plazos sus vacaciones refleja el cambio de paradigma: en su mayoría jóvenes de entre 25 y 34 años, concentrados principalmente en grandes núcleos urbanos como Madrid, Barcelona y Valencia. Esta generación prioriza la experiencia frente a la adquisición de bienes materiales y busca flexibilidad tanto en su forma de viajar como en sus métodos de pago.
Tendencias emergentes en el turismo 2025
El turismo está evolucionando hacia modelos más conscientes y sostenibles. Según el informe «The State of Shopping 2025», elaborado por Scalapay, con datos exclusivos de Casaleggio Associati, consultora de estrategia digital, un 29% de los consumidores de entre 25 y 34 años ha planificado viajes en torno a eventos deportivos, combinando hobby con turismo. Además, los destinos alternativos, que escapan del turismo masivo, ganan peso gracias a una mayor sensibilidad medioambiental y cultural.
Este cambio en las preferencias también está redefiniendo la estrategia de los profesionales del sector. Las facilidades de pago se integran como un valor añadido en la oferta turística, convirtiéndose en una herramienta clave para diferenciarse y fidelizar a un cliente cada vez más exigente y digital.“El futuro del turismo pasa por ofrecer experiencias únicas con un acceso más flexible y transparente. En Scalapay, estamos comprometidos con facilitar este cambio, ayudando a los operadores del sector a adaptarse a las nuevas demandas del viajero y a construir relaciones más duraderas con sus clientes”, afirma Simone Mancini, CEO de Scalapay.
